-claro claro!...eso no me importa, por mi pueden destrozarlos los perros...lo unico que me importa es que traigas uno de esos libros, no importa de quien...cumple tu mision-
Dijo seriamente el lider de Akatsuki, con un maligno brillo en su mirada mientras alzaba la mano para indicarle a Itachi que se marchase, la mision ya habia sido dada.