Al final del acantilado

El dia anterior Athrun habia regresado al castillo, en busca de Aleanor, pero ella ya no estaba, se preocupo un poco pero al recordar su manera de comportarse dejo la preocupacion de lado, ella podia arreglarselas solas, eso era seguro, aun asi continuo buscando por el lugar, hasta que al fin encontro algo, la carta de Aleanor, luego de haberla leido continuo con su viaje, terminando en Nihilo de alguna manera, ya tenia pensado visitar este lugar, pero no tan pronto, encontrando un pequeño banco en una de las calles de la cuidad, reeleyo la carta.

Muchas gracias por el diccionario, ya comprendo muchas cosas gracias a tí, espero no haberte molestado con mi presencia.

Volveré.

Aleanor

Finalizaba la carta por segunda vez, meditando un poco mas sobre la pequeña, aun se preguntaba como era que no habia sido eliminado alli, en la boca del "vampiro", un lugar rebosante de ellos, en el cual el simple olor lican les resultaba repugnante a los seres de aquella especie, era un suicidio quedarse alli, pero tenia algo que hacer, lo sabia...

A toda carrera traspasó la maloliente puerta de Nihilo, hacía tiempo que no visitaba aquella asquerosa ciudad en busca de venganza. A paso lento y precavido comenzó a caminar por la calles, raramente los vampiros parecían estar fuera de su cálida madriguera. Transformado en licántropo merodeó buscando cualquier presa vampírica. Si los adultos no estaban...pensaba para sus adentros. Todos debían ser erradicados.

Conocía a aquella ciudad a la perfección, tantas incursiones suicidas…bien poco le importaba, quitarse la vida era difícil, morir no era importante y mataría a todos aquellos que le hicieron tanto daño, por tantas muertes, las vengaría todas.

Aquella peculiar calma que rondaba por el lugar duro poco, un aroma similar al suyo pero desconocido inundo el aire, esta esencia era muy fuerte como si estuviera pateando su nariz, se levanto del banco en el cual se encontraba sentado, guiandose con su olfato para ubicar a la persona que emitia ese olor. Luego de no mucha caminata encontro la fuente de este, un Lycan transformado caminando tan campante como si se tratara de un vampiro por las calles de Nihilo, una de dos, aquel individuo queria morir o confiaba demasiado en su poder.

-acaso estas loco? si por una de esos curiosas casualidades los vampiros no sintieran tu olor, al estar transformado estar firmando tu sentecia de muerte chico-

lo observo directo a los ojos, con su tipica mirada calma pero amenazante a la vez, esperando alguna respuesta o reaccion del sujeto con el que compartia raza.

Se detuvo, lentamente dirigió su mirada hacia él, sonrió mostrando los dientes afilados.

- Aplícate el cuento- dijo con una voz atroz y casi incomprensible tratando de vocalizar, en sus transformaciones había empeorado su lenguaje- a ti también te canta el aliento, la diferencia es que no me importa ser el objetivo- dijo mientras daba por finalizada la charla y comenzada a caminar inmerso en sus pensamientos.

-como quieras, has sido advertido pero eres el primer Lycan que conozco con una actitud tan deshonrosa, nuestra especie tiene una ley y esa es hacer todo lo que se pueda con la vida, no desperdiciarlo como parece que tu haces...-

algo le decia que aquel individuo era lo que habia llamado a Athrun, quizas por eso se encontraba alli ahora.

-por cierto mi nombre es Athrun-

Olisqueó por última vez el aire de la ciudad, gruñó insatisfecho, parecía que aquella noche los vampiros no estaban en casa. Caminó hacia la puerta.

- Yo no soy de tu especie y nunca lo seré- dijo mientras se transformaba en humano rápidamente- yo solo soy un error de cálculos, si no he elegido ser así tampoco tengo que adaptarme a vosotros- miró hacia la ciudad- y tampoco perdonarles la vida a ellos- masculló entre dientes.

Caminó hacia la salida de la ciudad, tendría que viajar a buscar nuevas presas.

- Por cierto, yo soy Ginji- se giró y le miró desde la distancia- tú qué haces aquí, se supone que eres honroso y esas cosas- dijo pícaramente entre gestos

-yo tampoco naci Lycan, por si no lo sabias-

por su mente pasaron recuerdos del pasado, cuando aun era un humano, no extrañaba aquella vida pero lo que si en ese estado todo parecia mas pacifico, o quizas simplemente que ignoraba lo que pasaba a su alrededor.

-bueno que una persona honrosa no puede visitar a sus compañeros vampiros?-

dijo riendo un poco
-pero ya hablando en serio, algo me atrajo aqui, quizas sea salvar a alguien que parece haber perdido su camino...-

- Quizás deberías seguir esperando, seguramente mañana te encontrarás con los vampiros, ellos sí que han perdido su camino- dijo con un atisbo de sonrisa maquiavélica en su boca, le miró, fijamente, estaba seguro de que Athrun se quedaría esperando en Nihilo.

Siguió caminando por una senda cerca de la capital de Lavia, Nihilo, que se encontraba geográficamente, en el centro de aquel dominio vampírico.

- ¡Fuerza y honor!- gritó desde la lejanía, sabía que Athrun lo escucharía

-Perdido el camino?...parece que el unico cachorro extraviado aqui eres tu...Ginji.-

Un hombre de voz suave pero firme se dirigió al lycan mientras descendia del cielo lentamente, en la ciudad de Nihilo la noche era eterna y aquellos tan tontos para creer que podian caminar a sus anchas y profanar el honor de los vampiros, estaban condenados a pagar el precio.

-Nunca te cansas de venir aqui para ser pateado una y otra vez?...estoy cansandome de tus impertinencias bolsa de pulgas, quizas sea hora de que alguien te ponga en tu lugar.-

Aquel misterioso hombre movió su mano en un giro rapido y una gran guadaña se materializo en su mano. El vampiro frente a él era conocido como Jedah, uno de los comandantes de las fuerzas del orden en la ciudad...no por ser vampiros carecian de un orden y un sistema de justicia, y ese hombre Jedah, estaba encargado de impartirla.

-Ya he tenido suficiente de ti, por el honor que me confiere la alta cupula vampirica, te sentencio a la muerte!!-

Bramó el vampiro mostrando una sonrisa de satisfaccion preparandose para cumplir con su sentencia, finalmente tendria la chance de probar la sangre de aquel animal y privarle de ella por completo. Mientras se mantena preparado, miró a Athrun y le mostró la misma sonrisa altanera, arqueando las cejas mientras le miraba de lado. -Y tu...no te vayas muy lejos, tendré que revisar tus permisos para estar aqui...no me hagas cazarte por toda la ciudad.-



Jedah; Comandante vampiro

Level 3

HP=300
A1=60 (corte con guadaña/ ataque con garras)
A2=40 (Ataque con extension de alas/ garras latigo)
Limite: Bloodsong (Un profundo corte con su guadaña que produce un gran sangrado el cual es absorvido por el vampiro, quien recibe el ataque pierde 50 HP y Jedah recupera la misma cantidad)

-parece que te has encontrado problemas, seras capaz de arreglartelas tu solo?-

expreso tranquilamente, mientras miraba con confianza a Ginji. Jedah se habia ganado una reputacion incluso para ser conocido por los hombres lobo, era un adversario para tener en cuenta, y la prueba perfecta para enseñarle una leccion al inexperto Lycan.

-mejor no te confies, si no acabara contigo...-

por el momento se limitaria a observar, al ver a alguien combatir es cuando realmente uno puede darse cuenta como es...

Sonrió socarronamente, se giró y observó al vampiro con afán.

- Bien, luchemos Jedah- dijo oscuramente- al fin y al cavo, ¿qué es la muerte?- lo pensó durante un corto tiempo- quisiera descubrirlo...

Poco a poco se transformó en licántropo. Miró con rabia al vampiro, se alzó a gran altura del suelo, sobre sus patas traseras esperando al ataque, con la espalda incurvada hacia delante.

- Comamos y bebamos, que mañana moriremos- dijo a duras penas convertido en licántropo

-pffff!....jajaja! quien crees que eres? una especie de martir que no valora su vida?- jedah se cruzó de brazos un momento, balanceando lentamente la guadaña de manera pendular mientras miraba al lycan con una sonrisa divertida.

-Pues si tan poco te importa, entonces tomaré tu sangre y tu vida en mis manos...serás un gran regalo para el lord de los vampiros, he oido que siempre ansió una mascota a la cual domesticar- Las alas en su espalda y en su cabeza se abrieron ampliamente dandole una pariencia majestuosa y peligrosa por igual, la sonrisa del vampiro se habia curvado en un gesto de tension previo a la batalla. Desentrelazó los brazos e hiso girar la guadaña sobre su cabeza colocandose en posicion de batalla.

-Bien Ginji...espero que al menos me des una caceria digna, tantas veces has huido de mis garras que no pienso dejarte escapar una vez más.-

El vampiro se lanzó a una velocidad vertiginosa contra el lycantropo, acortando distancia entre ambos hasta que lo tuvo a distancia de ataque...en ese momento sus garras se extenderon y alargaron lanzando un corte contra su rival a la altura de su pecho.

A2(ataque con alas/garras)=40 daños -usos.

El miembro 'Neo-Admin' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

'Dado de ataque' :

Jedah era tan rápido como había oído hablar de él, su ataque le había pillado desprevenido. A pesar de ello saltó hacia un lado con todas sus fuerzas.

El miembro 'Ginji' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

'Dado de defensa' :

A pesar de ello las asquerosas garras del vampiro le habían atrapado, sin pararse mucho a forcejear, lanzó al vampiro una dentellada hacia su cuello.

A1: ataque físico- 20 daño/ (4 usos restantes)

El miembro 'Ginji' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

'Dado de ataque' :

Una brisa de viento trajo a su olfato un olor a sangre bastante extraño, no era humano, pero tampoco pertenecía a un licántropo o un vampiro, unos segundos más tarde escuchó un grito proveniente de algún lugar demasiado cerca, quizás hacia arriba. Intentó captar algo más con la mirada, ¿Podrían ser dos sus atacantes? a pesar del esfuerzo no podía atenuar su atención sobre su asqueroso contrincante, se encontraba de espaldas en la puerta principal de Nihilo, era la única información recopilable en aquellos momentos.

En un acto horrible, el vampiro abrió la boca descolocando la mandibula generando un tamaño casi imposible...de haberlo querido podria haberse tragado entera la cabeza de Ginji, aunque en vez de eso, profirió un grito de una frecuencia terrible que resonó a travez de la ciudad.

De inmediato, los otros gritos se acallaron y la ciudad se sumió en un sepulcral silencio. El vampiro regresó a sus facciones naturales y aclaró su voz en un gesto cuasi caballeroso -Lo siento por ese exabrupto...pero si alguien aquí va a ponerte en tu lugar, ese seré yo y solo yo...esta batalla es personal, Ginji-
El vampiro sonrió y se dedicó a defenderse del ataque que el lycan habia lanzado, la batalla entre los dos apenas comenzaba.

El miembro 'Neo-Admin' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

'Dado de defensa' :

HP=280

Al parecer se habia confiado de la peligrosidad del lycan, aquella dentellada no habia alcanzado su cuello completo, pero le habia provocado una seria herida casi en la base del mismo...afortunadamente su regeneracion trabajaba rapido. Sin darle tiempo a reaccionar, alzó su guadaña y lanzó un furioso corte contra el cuerpo del lobo.

A1=60 daños (corte con guadaña) 4 usos restantes

El miembro 'Neo-Admin' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

'Dado de ataque' :

Desde su caída rodó por la tierra hasta que finalmente paró, mareado medio se incorporó, sentado en el suelo se llevó las manos a la cabeza.

-Como duele...- dijo entre dientes mientras se la frotaba como si aquello pudiese atenuar el dolor.

No sabía muy bien donde se encontraba, estaba más que desorientado, le dolía todo el cuerpo, seguramente le saldrían cardenales por todo el cuerpo.

Salió por la puerta principal de Nihilo impulsado por el fuerte golpe de la guadaña sobre su torso, tropezó con algo grande y duro que estaba a sus espaldas, desde el suelo miró amenazadoramente a aquel que le había provocado la caída. Se trataba de un niño de pelo azul.

- ¡Mira por donde andas enano!- le gritó con su voz natural de humano.

Por el fuerte impacto de la guadaña había perdido su transformación.

- A quien llamas enano, yo no soy un enano, te vas a enterar saco de pulgas licántropo peludo, ¡Yo no soy un ENANO!- le gritó mientras se levantaba enérgicamente y le miraba furioso- ¡repítelo si tienes agallas!